Hotel wellington barcelona
Desglosando Hotel wellington barcelona
Si deseas una primera toma de contacto con la ciudad de Barcelona de forma low-cost, puedes apuntarte a un free tour para conocer la urbe. También hay tours especializados en temáticas. Esta alternativa es ideal para poder recorrerte cada rincón de la urbe.
Se recomienda no sentarse sobre las terrazas de La Rambla para comer o tomar algo, ya que la relación calidad precio es bastante pésima. Es más recomendable callejear por alguna de sus otras calles para adquirir los mismo productos a costes considerablemente más económicos.
Dos de los edificios más importantes de la urbe se encuentran en la Plaza de Sant Jaume los cuales con el municipio y la Generalitat. El municipio lo puedes ver gratis los domingos por la mañana. La Generalitat en cambio, solo se puede visitar el segundo y cuarto fin de semana de cada mes.
Si estás pensando en visitar un sitio religioso en Barcelona no te puedes perder el Monasterio de Pedralbes. Tanto su claustro como su iglesia, son dos de los mejores ejemplos del estilo gótico catalán. El claustro es uno de los mayores de estilo gótico en el planeta.
El Laberinto de Horta se trata de uno de los parques más bonitos de Barcelona, un espacio romántico en el que se combinan perfectamente la arquitectura y la naturaleza. Se encuentra junto a la Sierra de Collserola y su nombre procede del laberinto de cipreses recortados.
Sus ciento cuarenta y dos metros de altura, que custodian el cielo de Barcelona, te impresionaran. La Torre Agbar fue construida por el arquitecto francés Jean Nouvel, quien se inspiró en la arquitectura de Gaudí. Uno de sus primordiales atractivos son sus luces alterables que aún son más singulares en determinadas temporadas del año.
La Fundación Miró es un museo que alberga una gran parte de las obras del artista, aparte de obras de otros artistas contemporáneos importantes. El programa de actividades Familimiró incluye talleres, espectáculos y visitas a la compilación permanente.
Situado en la plaza de España, el centro comercial Las Arenas ocupa el espacio que en su día tuvo la vieja plaza de toros de Barna, que quedó inutilizada como al desde el diecinueve de junio de mil novecientos setenta y siete, día en que se festejó aquí la última corrida.
Después de un largo día de excursiones y turismo por la urbe, que opción mejor que relajarse en el parque de la Ciudadela. Uno de los parques más esenciales y visitados de Barna. Este pulmón verde dentro de la urbe es gratis y se encuentra muy cerca del Arco del Triunfo.
En la parte alta de la urbe, en la falda de la Serra de Collserola, se encuentra el Parque Guell, uno de los más famosos y visitados de Barna. Se trata de un parque diseñado por Antonio Gaudí y que, al lado de otras obras del arquitecto catalán, está declarado Patrimonio de la Humanidad.
Las Ramblas es una de las principales avenidas de Barna y uno de sus lugares más simbólicos. Discurre entre la Plaza de Cataluña, centro neurálgico de la urbe, y el Puerto Viejo. Paseando por ellos vas a poder disfrutar del Palacio de la Virreina, el Mercado de la Boquería y el Teatro de El Liceo.
Obras de los arquitectos alemanes Ludwig Mies van der Rohe y Lilly Reich, el Pabellón Alemán de Barcelona, fue construido como pabellón de Alemania para la Exposición Internacional de Barcelona de 1929. Está considerado uno de los jalones en la historia de la arquitectura moderna y ha servido de inspiración para múltiples generaciones de arquitectos.
Otro de los museos indispensables que ver en Barna es el Disseny Hub Barcelona. Un museo situado en un vanguardista edificio y que fue creado con la integración de las compilaciones del Museo de las Artes Decorativas, el Museo de Cerámica, etc Hotel wellington barcelona.
También conocido como el Puerto Viejo de Barcelona, el Port Vell es la zona más vieja del Puerto de Barna. Hoy en día sus instalaciones están destinadas a embarcaciones deportivas y en su parte central se encuentra el centro comercial y el ocio Maremagnun.