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La mejor manera para llegar al castillo de Montjuic es en teleférico. En el trayecto, tendrás Barcelona a tus pies y hay tres paradas las que te dejan en el parque Montjuic, en el castillo de Montjuich o en el mirador de Regidor.
Cuando cae la noche las Fuentes Mágicas de Plaza España se llenan de colores y música. Esto es ideal para pasar una enorme velada cenando cerca de allá y una vez se haga por la noche poder contemplar la fuente de luces con música tomándote algo en alguna terraza próxima.
En mil novecientos noventa y dos, el Port Olimpic de Barna, fue el escenario de las competiciones de candela de los JJ. OO. que se celebraron en Barcelona y hoy es una zona de ocio más animadas de la urbe. Está cerca de la playa, donde se pueden hacer deportes náuticos, y cuenta con muchos restoranes donde saborear el alimento propia de Barna.
Situado en las Ramblas, el Gran Teatro del Liceu ha visto desfilar desde 1847 a los mejores artistas de la lírica. Está considerado como uno de los teatros de ópera más importantes del planeta. Una visita guiada puede ser una idea fantástica para poder conocer sus rincones y su historia.
El Depósito de las Aguas es un imprescindible edificio que fue construido con el fin de guardar agua para regar el Parque de la Ciudadela y alimentar la catarata monumental. Para conseguir la presión precisa, el agua se guarda a catorce metros de altura.
Si estás pensando en visitar un sitio religioso en Barcelona no te puedes perder el Monasterio de Pedralbes. Tanto su claustro como su iglesia, son dos de los mejores ejemplos del estilo gótico catalán. El claustro es uno de los mayores de estilo gótico en el planeta.
Si a los más pequeños de la casa les agradan los trenas, seguro que les encantará el Museo del Tren. Cuenta con más de 50 automóviles de toda clase, que ilustran la historia de este medio de locomoción. Esta es uno de las muchas actividades que puedes hacer con niños.
Uno de los monumentos más importantes de Barna es como muchos ya conoceréis la Sagrada Familia. Una increíble basílica desarrollada por Antonio Gaudí. Comenzó a ser construida en 1882 y aún se halla inconclusa. En ella se refleja la totalidad artística de Gaudí, que dedicó a su diseño una gran parte de la carrera.
El Palau de la Música Catalana es otro de los monumentos declarados Patrimonio de la Humanidad. Al igual que el Centro de salud de la Santa Creu i Sant Pau, es obra del arquitecto Lluis Domenech i Montane y uno de los mejores ejemplos arquitectónicos del modernismo catalán.
La casa Batlló Oferta hotel y cena barcelona fue construida por Gaudí entre mil novecientos dos y 1906, transformando un edificio cualquiera de la ciudad en una creación pasmante. Sus paredes policromadas, balcones y techos escamosos os van a dejar con la boca abierta.
¿Y que te semeja la idea de ver un atardecer desde los Búnkeres del Carmel? Siendo una de las mejores vistas de toda la ciudad ya que desde allá se va a poder contemplar toda Barcelona. Se puede llegar en turismo, taxi o en autobús, en el último tramo hay que andar un tanto.
El museo de Ciencias Naturales de Barcelona es otro de los imprescindibles que ver en Barcelona. Cuenta con 5 sedes repartidas por la urbe. Dos de ellas, el Castillo de los Dragones y el Museo Martorell, están hoy en día cerradas al público.
El Museo Picasso se complace de tener la mayor colección de obras de juventud y del periodo formativo del artista malagueño en Barcelona, y no es para menos. Recorrer este museo que ocupa varios palacios medievales es un privilegio a la altura de los lienzos que cuelgan de sus paredes o de sus esculturas y grabados.
Además del barrio Gótico y el Born, hay otros barrios que ver en Barcelona que merece la pena conocer como el paseo Gracia, que parece un pueblo en la gran urbe y ha sabido sostener la autenticidad alejándose de las grandes cadenas de tiendas y restaurants.
